En la madrugada de ayer, casi la totalidad de los haitianos indocumentados que vivían en los sectores de San José y La Mina terminaron de abandonar voluntariamente esos lugares, y los pocos que quedaron serán integrados a las Juntas de Vecinos y otras organizaciones de la zona, dijeron líderes comunitarios y autoridades de Migración en la zona norte al término de un encuentro.“Apenas quedaron entre 80 a 100, cuando eran 2,800, sólo están viviendo aquí los que trabajan, estudian y se portan bien, los demás tuvieron que irse”, dijo a LISTÍN DIARIO el presidente de la Junta de Vecinos de San José y La Mina, José Francisco Consuegra.
Mientras, el encargado de Asuntos Haitianos de la subdirección de Migración en la zona norte, Ramón Ureña, dijo que en la reunión de ayer celebrada sin el acceso de la prensa, ambos grupos se comprometieron a trabajar unidos por mejorar las condiciones del barrio y garantizar la limpieza y su seguridad.
En vista de que los haitianos que quedaron viviendo en San José y La Mina no tienen documentos, Migración se comprometió a dotarlos de carnés provisionales, de manera que puedan transitar por el país sin problemas.
Igualmente, Ureña declaró que los representantes de los grupos haitianos de San José y La Mina reconocieron que sus compatriotas no pueden alquilar pensiones que no dispongan de baños, agua potable y otros servicios básicos.
Mientras el presidente de la Junta de Vecinos informó que los pocos haitianos que quedaron viviendo en esos barrios tienen entre 7, 10 y 13 años en sus comunidades, y que la mayoría estudian, trabajan y se portan bien, por lo que no tendrán problemas.
Según Consuegra, fue una decisión correcta y civilista la que tomaron la mayoría de los haitianos que vivían en esas comunidades de marcharse voluntariamente.
En ese contexto, expresó que aquellos que se quedaron los vecinos de esos lugares los asumen como hermanos porque trabajan y estudian, y que inclusive las juntas de vecinos se mantendrán vigilantes para que Migración los dote de documentos temporales, además de que serán incorporados a las organizaciones comunitarias y a las actividades que desarrollan.
“Los que quedaron en nuestros barrios son un total de casi cien, esos no tendrán problemas, al contrario, los protegeremos, pero no aceptamos uno más”, insistió Consuegra.
El dirigente dijo que Migración es la responsable de la presencia masiva de haitianos indocumentados en barrios y comunidades, muchos de ellos cometen todo tipo de delitos.
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