domingo, 9 de diciembre de 2012

¡Pentagrama!


La música se escribe en el corazón y se reproduce luego en el pentagrama.

Se escucha primero en el alma, luego se oye en la cuerda, se prepara en el corazón y se proyecta en el teclado. Con el silbido  del aliento divino se cuela en el oído del instrumentista y se empuja con el soplido susurrante del flautista.

Se afina en la corte angelical y se ensaya entre los telones de los montes. Sobre las arenosas dunas el rastro de Dios acomoda corcheas y semifusas.

El cielo y la tierra están llenos de pentagramas que la misericordia divina compone durante tus oscuras madrugadas, himnos de victoria para quienes han creído en su fidelidad.

Y así, la música convierte algunas páginas de nuestra dura existencia en maravillosas sinfonías de vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Arrestan a padre que “castigó” a su hija con un block en la cabeza

La Policía Nacional apresó al padre que “castigó a su hija de siete años, en la comunidad de Moca, haciéndola cargar un block. En las...