Jóvenes muertos en la Luperón estaban en cuarto de bachillerato; un era pelotero

Lo que inició como una simple travesura terminó en una tragedia que cobró la vida de un joven pelotero y otro compañero suyo, en un accidente de tránsito en la que otros tres salvaron la vida milagrosamente.

La muerte de Elisaul Batista de 19 años y Deivi Andrés Ventura Almonte de 18, llevó el luto a sus hogares, donde eran los hijos mayores de sus respectivas familias, y al sector Los Ríos donde velaban sus restos, en la funeraria Madre Vieja llena de personas, sobre todos sus compañeros de estudios. Ambos cursaban en cuarto de bachillerato.

El accidente se produjo en la avenida Luperón esquina Caonabo, cuando pasada la una de la madrugada se dirigían a una discoteca a celebrar el cumpleaños de un amigo, aunque en sus casas habían dicho que iban a lavar el carro de la familia de Elisaul, según narraron sus familiares.

Eliseo Antonio Sánchez Mancebo, quien sobrevivió a la tragedia junto a Orlando Aracena García y Willian Toribio, dijo que solo recuerda que el vehículo perdió el control cuando iban para la discoteca en el sector de Herrera.

Con lesiones en varias partes del cuerpo, Eliseo lloraba la muerte de sus amigos.

El carro donde se desplazaban los jóvenes, un Toyota Camry, quedó totalmente destruido y era conducido por Deivi, según informaron sus parientes en la funeraria. Éste además de ser estudiante del bachillerato en el liceo Fray Ramón Pané, trabajaba en un autoadorno en la avenida Luperón.

Mientras que Elisaul, esperaba ser firmado como pelotero profesional, en cuyo deporte se destacaba como lanzador, además tenía habilidades para instalar equipos de música a los vehículos dijeron sus parientes.

La partida de Elisaul y Deivi ha marcado a sus madres Claudia Rodríguez, propietaria del vehículo accidentado y Celeste Agramonte, quienes soñaban con ver a sus hijos mayores realizarse.

Varios de sus compañeros de estudios coincidían en que eran jóvenes ejemplares, que nunca se vieron envueltos en problemas.” Estudiar y trabajar” era lo que hacían, además de que Elisaul era casi pelotero profesional” dijo una joven en medio del llanto.

Los restos de Elisaul y Deivi serán enterrados en el cementerio Cristo Redentor este miércoles.