En un hecho poco observado en la historia del béisbol dominicano, los peloteros se agruparon en apoyo a su colega y ninguno salió ni siquiera a realizar sus calentamientos en ninguno de los encuentros programados para efectuarse en el estadio Quisqueya (Gigantes versus Escogido), El Tetelo Vargas, (Licey ante Estrellas) ni el parque Cibao (Toros contra Aguilas).
Mario Soto, presidente de la Fenapepro expresó que los jugadores no saldrían al terreno hasta que la comisión de apelación revoque la suspensión establecida por el presidente de la Liga, doctor Leonardo Matos Berrido el pasado martes que suspendía a Arias por el resto de la campaña y multado con 25 mil pesos.
Hasta anoche aún no había una decisión oficial sobre el fallo de dicha comisión de la Liga integrada por el doctor Alejandro Asmar Sánchez y Orlando Pérez Ubiera, aunque el primero conversó con Soto, vía celular, por espacio de unos diez minutos.
Anoche había trascendido que la Comisión de Apelación había revocado la suspensión, sin embargo faltaba una firma. Ni la liga ni la Comisión de Apelación emitieron comunicado alguno a la prensa.
“Nuestra intención no es entorpecer el torneo, si la comisión de apelación nos envía este sábado la comunicación de revocación antes de la elaboración de las nóminas de jugadores entonces habrá partido en esta fecha y el torneo continuará su curso normal”, expuso Soto, cuyo impasse lo llevó a tener un día muy agitado.
De primera mano no se anunció la fecha en que serán celebrados los partidos.
La mayoría de los peloteros ni siquiera se uniformó, los equipajes permanecieron en el pasillo, no hubo calentamientos, mucho menos prácticas de bateo y los dirigentes no hicieron sus alineaciones.
“Siempre hemos mantenido cordiales relaciones con la Liga de Béisbol, pero debemos defender a nuestros muchachos y consideramos que Arias es usado como “chivo expiatorio” en este caso, expuso Soto.
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