La Organización Panamericana de la Salud (OPS) estima que habrá unos 2 ó 3 millones de casos de zika en Latinoamérica y alerta de que los 100.000 reportados hasta la fecha "no reflejan la magnitud de la situación", porque muchas personas no van al médico al no tener síntomas o si estos son leves.
"Ese dato no representa el alcance que creemos que tiene el zika, necesitamos mejores diagnósticos. Brasil ya ha estimado que llegará a tener 1,3 millones y Colombia medio millón", explicó ayer Marcos Espinal, director del Departamento de Enfermedades Contagiosas de la OPS, en la reunión anual de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia (AAAS) en Washington.
El experto basa su estimación en que en 2015 hubo en la región 2,3 millones de casos de dengue y 600.000 de chikunguña, de cuyo contagio es responsable el mismo mosquito que el del zika, el "Aedes aegypti".
"No me sorprendería que tengamos dos o tres millones de casos de zika, porque estamos viendo que el mosquito lo transmite con tanta o más eficacia que el chikunguña", explicó Espinal.
América Latina es la región más afectada por el actual brote de zika: 26 de los 30 países y territorios donde se ha reportado la transmisión local del virus pertenecen a la región.
"Toda la población está en riesgo, porque el virus es nuevo en el continente y, por tanto, nadie tiene inmunidad", subrayó Espinal.
El experto insistió en que "todavía no se puede hablar de causa-efecto" entre que una embarazada se contagie de zika y que su bebé tenga una microcefalia, hasta ahora el elemento de mayor preocupación sobre el virus.
"Solo podemos hablar de vínculo potencial. Brasil y Colombia están haciendo estudios de casos que nos dirán mucho sobre esta cuestión", precisó.
El director de estrategia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Christopher Dye, quiso subrayar, por su parte, que la "evidencia causal" entre el zika y la microcefalia "es más y más grande".
"En este caso, el zika es culpable hasta que no se pruebe inocente", aseguró.
Dye estimó que van a darse "muchos más casos" de microcefalia en América Latina, aunque admitió que, en este momento, es imposible hacer pronósticos con más precisión.
"Brasil ha reportado 4.000 casos de microcefalia y el número de casos va a incrementar en América Latina, no sabemos hasta cuánto, pero no hay duda de que es un motivo de gran preocupación", agregó.
Una de las dudas que despierta la posible relación con la microcefalia es en qué periodo del embarazo se corre más riesgo si la mujer se infecta del zika.
"El primer trimestre es siempre el más vulnerable, por tanto es más probable que el efecto sea más profundo en ese periodo pero no podemos decir que no puede ocurrir en los otros dos trimestres, porque ya hemos visto algunos casos", señaló Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos.
Estados Unidos todavía no tiene ningún caso de contagio autóctono por picadura de mosquito, pero Fauci no descarta que pueda haber "mini-brotes" en los estados donde está presente el insecto: Florida, Texas y el resto de los del Golfo de México.
Cada año viajan unos 30 millones de personas entre Estados Unidos y Latinoamérica, la mitad de ellas mujeres embarazadas, según los datos que ofreció Fauci para dar una idea del riesgo de contagio que existe.
"No sería sorprendente ver contagios locales, pero es altamente improbable que se expandiera de manera amplia. Ya tuvimos mini brotes de dengue y chikunguña en Florida y Texas y los atajamos controlando el mosquito", apuntó.
Mientras se desarrollaba la conferencia de prensa en Washington, trascendió la noticia de que un grupo de científicos británicos halló restos del zika en el semen (no en la sangre ni en la orina) de un hombre británico de 68 años, contagiado a su regreso de las Islas Cook en 2014, tanto al día 27 de detectarse el contagio como en el 62.
Las conclusiones del estudio, que elaboraron investigadores de la agencia ejecutiva del Departamento de Salud británico (PHE, por su sigla en inglés), las adelanta hoy la web de la revista Emerging Infectious Diseases, de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU., antes de su publicación en mayo.
El caso del hombre británico sería el segundo en el que se detecta la presencia del virus en el semen, tras el de un hombre contagiado en 2013 en la Polinesia Francesa, según informaciones científicas publicadas por el CDC.
Además, se ha informado de al menos dos casos de trasmisión sexual del virus. El primero ocurrió cuando un científico contagió a su mujer en Colorado (EE.UU.) a la vuelta de un viaje de trabajo en Senegal en 2008.
El segundo trascendió recientemente cuando las autoridades de Dallas (Texas, EE.UU.) informaron de que un hombre había contagiado a su pareja tras infectarse del virus por la picadura de un mosquito en otro país.
Por ahora, no existe ni vacuna ni tratamiento contra un virus que fue descubierto en los años cincuenta en el bosque Zika de Uganda.