La empresa contratada para la reconstrucción del canal Ulises Francisco Espaillat, colapsado hace dos semanas por las lluvias, trabaja en el desvío que permitirá de forma provisional llevar agua.Mientras, productores agrícolas de Santiago y la Línea Noroeste muestran preocupación por los estragos causados por la falta del líquido y esperan que sean agilizadas las labores.Tras rellenar el área afectada para permitir que los equipos pesados comiencen a trabajar, desde el pasado miércoles comenzaron abrir provisionalmente una trocha.
Sin embargo, se desconoce para cuándo estarán listos los trabajos y facilitar el acceso para la irrigación de las plantaciones agrícolas.
Con la rotura del canal Ulises Francisco Espaillat se han visto afectadas 500 mil tareas la mayoría sembradas de tomate, guineo y otros rubros y salieron de operación al menos 15 acueductos que brindan agua a Villa González, Hato del Yaque, Navarrete y La Canela.
Durante un recorrido por la zona afectada, el director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), Olgo Fernández, pidió un compás de espera de dos semanas para llevar agua de forma provisional a los productores.
Para terminar los trabajos de reparación del canal podría ser necesario esperar entre uno y dos meses, mientras los productores agrícolas temen perder sus cosechas e ir a la quiebra. ¿
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