El subdirector de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), Leonel Carrasco, indicó que el servicio será a puertas abiertas para el público y la intención es que los usuarios vayan practicando y conociendo su funcionamiento.
“Después que hagamos todos los ajuntes de lugar, lo vamos a poner en operación ya comercial con paga”, expresó Carrasco, quien, sin embargo, no especificó la fecha en que la segunda línea funcionará de forma productiva.
Las estaciones que funcionarán desde mediados de diciembre a lo largo de el corredor John F. Kennedy son la María Montez, ubicada en la esquina de la avenida Luperón; Pedro Franco Bidó, en la esquina Núñez de Cáceres; Francisco Gregorio Billini, en la esquina doctor Defilló; Ulises Francisco Espaillat en la esquina de la Winston Churchill; Pedro Mir, en la Abraham Lincoln; Freddy Beras Goico, en la Lope de Vega; Juan Ulises García Saleta, en la Ortega y Gasset y Juan Pablo Duarte en la Máximo Gómez.
Los usuarios podrán hacer un transbordo de la línea uno a la dos y viceversa en la estación Juan Pablo Duarte de la Máximo Gómez.
En este lugar convergen la estación de la línea uno y la dos, que comparten el nombre del patricio y se diferencian por el color azul para uno y el rojo para la dos.
Leonel Carrasco expresa que todo el personal de la Opret está bastante optimista con los trabajos realizados “y esperamos que la población muestre en esta segunda línea el mismo nivel de decencia que ha mantenido durante los casi cuatro años de operaciones de la primera línea”.
Indicó que esta apertura no tiene ningún fin politiquero, ni propagandístico, sino que la población vaya comprendiendo cómo pasar de una línea a otra.
“Nosotros tenemos la intención de pasar las navidades y un par de semanas después del año nuevo de acuerdo a la demanda de la población, con el interés de que la gente se adapte a la obra”, manifiesta Carrasco.
Toda la obra de ingeniería desde la avenida Luperón hasta la Máximo Gómez ya está terminada.
Opret cree que el Metro va rumbo a ser rentable
Leonel Carrasco vaticina que cuando la segunda línea entre en operación comercial, el Metro no tendrá que ser subsidiado.
Dos meses atrás había admitido dificultades para operar la primera línea del Metro por un atraso en la entrega del subsidio económico del Gobierno.
En la ocasión aclaró que requerían de esos recursos para evitar el deterioro progresivo de la infraestructura, que opera desde Villa Mella hasta el Centro de los Héroes.
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